Para algunos, la edad y sus limitaciones no son obstáculo para practicar deportes extremos como surf, andar en motocicleta y lanzarse en paracaídas, rompiendo un paradigma social de que después de los 60, la vida se trata de ser abuelo o abuela y descansar con la jubilación.

Pero mantenerse activo y en un estado mental juvenil es elección de todos.

En el mundo, el interés de las personas mayores en busca de adrenalina por cambiar el sofá por deportes de aventura ha crecido significativamente. 

La demanda de deportes extremos para personas mayores que exploran la naturaleza y el contacto con el medio ambiente ha crecido mucho en los últimos años.

Ya que estas actividades permiten mejorar la autoestima, reducir la aparición de depresión y estrés y mantener activo el metabolismo, por lo que retrasando los problemas típicos del envejecimiento.

¿Qué importancia tiene el deporte para las personas mayores?

Con los constantes avances en el campo de la medicina, hemos sido testigos de un notable aumento de la esperanza de vida de la humanidad, proporcionando un envejecimiento de calidad. 

Aunque existe un límite inherente a la longevidad, nunca se había visto la posibilidad de vivir tanto tiempo y con tanta vitalidad.

Numerosos estudios revelan que, incluso para las personas mayores que afrontan las consecuencias del envejecimiento, como la pérdida de masa muscular por el paso del tiempo, es perfectamente factible paliar estos efectos practicando actividades destinadas a ganar masa muscular.

Por ser tan buenos para el cuerpo y la mente, tienen el potencial de restaurar la autoestima de este grupo de población, aumentando la motivación y el placer. 

Además, es a través del ejercicio como las personas mayores pueden ver una mejora en sus reflejos y coordinación motora.

Sin embargo, la importancia del hábito no se limita a estos beneficios, dado que también es posible relajarse, interactuar más frecuentemente con otras personas, fortalecer el propio cuerpo y recuperar la confianza en uno mismo. 

Como resultado, el individuo se vuelve menos vulnerable a posibles accidentes como caídas.

Principales deportes extremos para personas mayores a poner en práctica

Los deportes de aventura permiten mejorar la autoestima, también reducir el estrés y en consecuencia la incidencia de la depresión, muy común entre las personas mayores.

Además de facilitar la práctica de actividad física, mantener activo el metabolismo, retrasando los problemas naturales del envejecimiento.

El trekking es una actividad muy recomendable para personas de cualquier edad, precisamente porque el deporte tiene varios niveles de dificultad, lo que lo hace muy accesible para cualquier practicante interesado en este deporte.

En el caso de las personas mayores, el trekking es importante ya que les brinda una forma de realizar actividad física, pero sin poner en riesgo su salud por el bajo impacto del ejercicio. 

Además, caminar en medio de la naturaleza es una buena oportunidad para relajarse y disfrutar de la belleza de la vida.

Otra actividad es el buceo, que proporciona una forma segura de mover el cuerpo y aprovechar los diversos beneficios que aporta el deporte. 

En este caso concreto hablamos de buceo en lagos o mares, en una versión más extrema del deporte.

A pesar de requerir supervisión médica, como todas las actividades aquí enumeradas, el buceo es una de las opciones más tranquilas y beneficiosas para la salud, precisamente porque activa diversos músculos del cuerpo, fortalece la respiración y aumenta la resistencia física.

Otra modalidad de deporte para personas mayores es la escalada de árboles, que consiste en caminar por senderos estratégicamente ubicados en los árboles.

Además de la actividad física, desafiar obstáculos es importante para la coordinación motora y la respiración, lo que ayuda enormemente a la calidad de vida de las personas mayores.

Otro beneficio percibido es la relajación mental, ya que trepar a los árboles, como su nombre indica, implica un contacto muy estrecho con la naturaleza y, en consecuencia, con toda la fauna y flora presente en el espacio de actividad. 

Así, caminar entre los árboles se convierte en otra excelente opción para todas las edades, incluidas aquellas que ya son mayores y aún tienen sed de aventuras.

Para los abuelos y abuelas más radicales, es posible optar por un deporte extremo más atrevido y, en este caso, el rafting aparece como una opción segura y divertida. Sin embargo, para las personas mayores se recomienda la práctica en ríos más tranquilos, para no poner en riesgo la seguridad.

Además de ser otro ejercicio que se puede practicar al aire libre, lo que, de por sí, ya conlleva otros beneficios, como plazas y parques, y no generar ningún tipo de coste para el practicante, la bicicleta suele ser una actividad muy placentera para quienes practicarlo.

En cuanto a las ventajas, las principales que podemos destacar son la promoción del equilibrio, el trabajo respiratorio y el fortalecimiento de miembros inferiores y cadera.

¿Cuáles son las principales precauciones a tomar en general?

Como las personas mayores, en general, tienen condiciones físicas diferentes a las de los más jóvenes, es fundamental que se observen algunas precauciones a la hora de practicar ejercicio físico, independientemente de la modalidad elegida. 

Algunas de las medidas importantes son cuidar aún más la hidratación, especialmente durante el verano y, cuando sea necesario, adaptar los movimientos de la actividad según las limitaciones preexistentes.

Al fin y al cabo, la intención de practicar actividades físicas es precisamente la contraria: mejorar la calidad de vida. 

Por eso, es importante que no descuides algunas acciones recomendadas antes incluso de aventurarte a realizar cualquier ejercicio.

Someterse siempre a una evaluación por parte de un profesional especializado, y en caso de ser necesario, realizar exámenes antes de comenzar a practicar cualquier actividad.

De hecho, se puede decir que este es el punto de partida no sólo para personas mayores que quieren empezar a hacer ejercicio, sino también para otros grupos de personas, como aquellas que llevan mucho tiempo sin practicar ninguna actividad física.

Sin embargo, incluso después de someterse a una evaluación médica, para que la práctica de actividades físicas efectivamente tenga un impacto positivo en la calidad de vida, es fundamental buscar orientación respecto a la modalidad, frecuencia, intensidad, duración, etc. más adecuada y empezar poco a poco.

En definitiva, aunque son, en general, muy beneficiosos, los deportes para personas mayores requieren moderación, atención y adaptación a las condiciones que presenta el organismo en la vejez. 

Al fin y al cabo, aunque realmente existan excepciones, lo ideal es que las personas mayores inviertan más en la calidad del tiempo dedicado a la práctica de actividades físicas y menos en intensidad.