Todos esperamos a que llegue el verano para tomar los primeros rayos de sol y coger un buen  bronceado. Nos ayuda a sentirnos más bellos, jóvenes y notar que la ropa nos queda mucho mejor.

BRONCEADO

Pero el sol es un arma de doble filo; si bien nos aporta muchos beneficios como la vitamina D y la fijación del calcio, también nos proporciona cierto peligro, sobre todo cuando hacemos uso y abuso de los rayos solares, especialmente cuando la piel aún se encuentra muy blanca.

Los protectores solares y los autobronceantes, son muy eficaces, siempre y cuando respetemos algunos horarios, los elijamos correctamente y los usemos según las especificaciones del fabricante.

Se presentan con distintos grados de factor de protección, y el índice del mismo deberá adecuarse al tipo de piel que se tenga. Cuanto más blanca es la piel mayor debe ser el factor de protección. Este factor puede ir bajando progresivamente a medida que nuestra piel va tomando color.

Debemos tener en cuenta un factor muy importante

Los rayos Ultra Violeta son esa parte de la radiación solar de baja longitud de onda, invisible al ojo humano, que son capaces de atravesar la atmósfera y nuestra piel. Aunque la ropa y las nubes son un filtro a dichos rayos, no bloquean totalmente su penetración.

Los más peligrosos son los UVB porque se ha demostrado que producen cáncer de piel. Los UVB atraviesan la epidermis por lo que se han desarrollado cosméticos con factores de protección solar, que previenen a la piel de las quemaduras solares.

Sin embargo, también se ha demostrado que los UVA atraviesan no sólo la epidermis sino también la dermis, que es la capa más gruesa que se encuentra bajo la epidermis. 

Los UV además, producen envejecimiento de la piel y en el caso de los UVB, son acumulables, por lo que cada persona tiene una capacidad limitada para recibir esta radiación solar a lo largo de su vida, y una vez concluida dicha capacidad, se queda sin protección natural contra dichos rayos.

¿Qué factor de protección necesitas? 

FPS para UVB: Protección débil (FPS 2) Protección media  (FPS 8), Protección intensa (FPS 15) y protección muy intensa (FPS 30). Los que se llaman pantalla total, (índice 50+) en realidad no son sustancialmente más eficaces pues por encima de 30 la diferencia de protección es insignificante.

PPD para UVA: Protección débil (PPD 2) Protección media  (PPD 4), Protección intensa (PPD 8) y protección muy intensa (PPD 14).

Bronceado con máxima protección

¡Protege tu piel y presume de bronceado con el bronceador FPS 50 Sun Uva! Este spray bronceador es ultra-rápido y activa la melanina, acelerando el bronceado de la piel. Producto cosmético de uso externo. Resistente al agua. Libre de aceites minerales y parabenos. 

Importante: No permanezca mucho rato al sol, aunque emplee un producto de protección solar. Mantenga a los bebés y niños pequeños fuera de la luz solar directa.

La exposición excesiva al sol es un peligro importante para la salud. Aplíquese antes de la exposición al sol. Para mantener la protección, repita con frecuencia la aplicación del producto, especialmente tras transpirar, bañarse o secarse.