La mayoría de los reproductores de DVD permiten a los usuarios reproducir audio y vídeo en distintos formatos leyendo la información directamente de los CDs o DVDs, pero a veces falla la reproducción

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Cuando colocamos un DVD dentro del reproductor, lo que hace el aparato es "leer" las pistas del disco óptico mientras ese gira dentro de la máquina.

En ocasiones sucede que el DVD no se reproduce y parece que el mecanismo está atascado y tendemos a sacarlo y meterlo varias veces pulsando el botón Play, cuando en realidad el problema está en el disco y no en el aparato.

La prueba del aparato

Cuando un DVD no se reproduce con normalidad, hay que hacer la prueba del aparato para determinar si el problema es del reproductor o del disco óptico.

La prueba es bien sencilla y atiende a una cuestión de lógica:

  1. En lugar de estar expulsando el disco y volviéndolo a meter, lo que hay que hacer es sacarlo del aparato y proceder a la limpieza del DVD mediante un producto adecuado que puede ser alcohol isopropílico, aunque también puede usarse un limpiacristales de calidad e incluso pasta de dientes usando en todos los casos una tela de microfibras o tela que no deje pelusas.
  2. Si tras meter el DVD limpio, este no puede reproducirse, habrá que probar con otro.
  3. Si el aparato tampoco lee los demás DVDs, hay que limpiar la lente del reproductor.
  4. Si lee unos si y otros no, habrá que limpiar los DVDs y también limpiar la lente
  5. Si solo es uno el que no lee, seguramente estará demasiado rayado o inservible.

Para limpiar el reproductor de DVDs no hay que desmontar el aparato, sino utilizar un limpiador de lentes de DVD que elimine el polvo y la suciedad.

Estos consejos son igual de válidos para los reproductores de DVDs domésticos como para los lectores de DVDs de los ordenadores.