Los códigos de barras están presentes en todo producto, desde medicamentos y alimentos hasta bienes de consumo duraderos. Pero, ¿te has preguntado cómo funciona el mecanismo? Aparentemente simple, los códigos de barra en realidad esconden un sistema organizado de clasificación, creado a partir de combinaciones numéricas representadas por las famosas rayas en las etiquetas.

códigos de barras

El principio detrás de los códigos de barras es el mismo de la computación en general: el código binario. De esta forma, las rayas representan una secuencia de ceros y uno.

El resultado es la descripción exacta del producto gracias a una base de datos consultada por el equipo lector, que puede ser un ordenador común o un smartphone.

Un código de barras se divide en 95 partes del mismo tamaño, ya sean negras o blancas. De esta manera, el equipo lee el código identificando qué columnas tienen color o no, asignando números cero y uno a las variaciones, cero para áreas de mayor reflexión de luz (blanco) y uno para áreas de menor reflexión (negro), generando un número de 95 dígitos.

Este conjunto de líneas paralelas verticales de distintos anchos y espacios se conoce como código de barras, que sirve para codificar y comparar información de un artículo, que al ser leído por un escáner proporciona datos relacionados con las características del producto como composición, precio, datos nutricionales y hasta fecha de vencimiento.

Esta herramienta fue patentada en 1952 por dos norteamericanos, pero sólo hasta mediados de los años 60, los principales industriales del mundo decidieron hacer del invento el estándar global de identificación para que cadenas y proveedores hablaran un lenguaje de negocios común.

En prácticamente todos los productos que consumimos, el código de barras está presente. Funciona como un “DNI” y ayuda a identificar estos elementos.

Sin embargo, para ello, es necesario disponer de una herramienta que sea capaz de hacer la lectura del patrón y transformarlo en información: es ahí donde entra el lector de código de barras.

¿Cómo funciona el lector de códigos de barras?

El lector de códigos de barras, también llamado escáner, emite un haz de luz roja, que recorre las barras haciendo su reconocimiento por el color o por la ausencia de ella.

En el caso de las barras negras, el lector absorbe la luz y, en las barras blancas, refleja. Esto permite la interpretación del código, que convierte la información en el código binario, 1 a negro y 0 a blanco, como se mencionó anteriormente.

Se puede notar que cada barra tiene un grosor diferente, lo que representa caracteres distintos.

Para leer el código de barras, basta con colocar el producto en el trazado rojo del lector, de forma que pueda "barrer" todas las barras.

En instantes, la información es capturada y transferida al ordenador, que hace la conversión de los datos.

Posiblemente, después de esa explicación, nunca más vas a mirar los códigos de barras de la misma manera, ellos leen y ponen a disposición la información para el usuario en una fracción de segundo.