Aunque muchos ancianos se preocupan por mantener su independencia, las personas mayores de 80 años necesitan algunos cuidados generales. Cuidar de ancianos en casa es un paso gigante, que debe darse con mucha conciencia, planificación y buena voluntad.

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Para los ancianos que prefieren seguir viviendo en sus hogares, los cuidados más importantes pasan por la seguridad en casa.

Asegúrate de que la casa está bien iluminada y que hay luces de presencia para la noche.

Ten en cuenta la disposición de los muebles para garantizar una fácil movilidad de los ancianos.

Evita la existencia de alfombras resbaladizas y adapta el cuarto de baño con barras de apoyo si es necesario.

Coloca los números de teléfono de la familia, vecinos y amigos junto al teléfono, escritos en números bien visibles.

Fíjate si en la cocina tienen todo lo que necesitan a mano, para evitar que el anciano suba a sillas.

Haz lo mismo con los demás armarios, colocando lo que más utilizan en estantes más bajos.

Vigilar y cuidar la salud de los ancianos es fundamental.

Si tienen o no alguna enfermedad o problema de salud, los ancianos deben ser vigilados de cerca.

Se asegura que hacen una dieta alimenticia equilibrada, que realizan algún tipo de ejercicio físico, que beben mucha agua y que no descuidan la toma de sus medicamentos.

En este caso puede adquirir un pastillero que facilita no sólo la organización de los medicamentos a tomar al desayuno, almuerzo y cena, sino también su control.

Sólo porque alguien tiene más de 80 años de edad no significa que tiene que pasar sus días encerrados en casa frente a la televisión.

Es esencial motivar al anciano a salir de casa y tener algún tipo de vida social.

Puede ser una simple caminata en el parque, ir a la plaza conversar con otros ancianos o tomar con amigas.

Mientras la mayoría de la gente piensa en auxiliares de movilidad como soporte para caminar.

Lo más importante es que le permiten alejarse de la cama y caminar un poco.

Si se levanta es beneficioso para el cuerpo y ayuda en la eficiencia respiratoria.

Aumenta la producción de anticuerpos que combaten las infecciones.

Reduce la pérdida de calcio en los huesos y permite que los alimentos pasen por el sistema digestivo de forma más adecuada.

Los auxiliares de movilidad pueden ayudarle a recuperar sus habilidades anteriores.

Ellos ayudan en la reducción del dolor del movimiento.

Los bastones y los taburetes para ducha son herramientas que permiten a una persona depender menos de los demás y adquirir un poco de independencia con seguridad.