Con el objetivo de proteger y mejorar la apariencia de hojas impresas, la plastificación se vuelve ideal. Contra los residuos, líquidos, grasas, humedad y demás factores que pueden ser perjudiciales y dañar su papel impreso.

plastificación

Se convierte en un procedimiento perfecto para la presentación de documentos, certificados, e incluso libros.

Ayudando en la conservación y haciendo que tu impresión permanezca en buen estado durante mucho más tiempo.

Las plastificaciones son muy útiles e ideales para documentos de empresas y para papeles de uso personal.

Al plastificar un papel, los estarás protegiendo de la suciedad, de los pliegues, del envejecimiento y de la decoloración.

La plastificación es más un recurso que la tecnología ha traído para dejar nuestro día a día más práctico y funcional.

Esta fue creada de la necesidad de proteger documentos que son muy manejados y pueden acabar rasgando y desgastando con el tiempo.

El plástico que envuelve el documento para que luego pase por el proceso de calentamiento.

Que lo endurece y produce el acabado que conocemos.

Vale recordar aquí, que una plastificación bien hecha no debe abrirse fácilmente, y debe durar mucho.

La gran mayoría de papelerías y gráficas producen plastificaciones hasta el tamaño A4.

Existen, tamaños más grandes como el A3.

Para el caso de plastificaciones de carteles, o aún menús más grandes.

La plastificadora compacta A3 para trabajos domésticos o de oficinas pequeñas que aplica una capa protectora de manera rápida y eficiente a tarjetas de identificación, tarjetas comerciales y menús es perfecta.

La máquina puede hacer plastificaciones en frío o en caliente y necesita entre 4 y 6 minutos para calentarse.

Cuenta con una luz LED de indicación de encendido y estado.

Puede plastificar hojas con un grosor entre 75 y 125 micrones.

También las plastificadoras compactas A4 son ideales para tenerlas en una oficina y en casa para que puedas plastificar todo que necesitas de manera muy cómoda y funcional.