Paraguas, según una leyenda china fue inventado por Lu Mei, una joven que había retado a su hermano a idear algo que les protegiese de la lluvia. En una noche, Lu Mei construyó un bastón del que pendían 32 varillas de bambú cubiertas de tela.  Lo cierto es que el paraguas ya existía en China en el siglo XI a. C. De allí pasó a Egipto y Grecia, donde fue usado como sombrilla.

paraguas

Tras la caída del Imperio Romano, desapareció hasta finales del siglo XV, cuando resurgió en Francia como objeto de lujo. 

Los primeros paraguas europeos estaban fabricados con madera o huesos de ballena, y cubiertos con pelo de alpaca. A medida que avanzaba la sociedad lo hacía también el material, que iba adaptando diferentes materiales como la seda, el algodón, o más recientemente el nylon.

En 1823, el químico escocés Charles Macintosh presentó el primer paraguas completamente impermeable, creado con caucho. Así, poco a poco se fueron abaratando los costes haciendo que fuese más accesible para toda la población.

¿De dónde viene la superstición que dice que el abrir un paraguas en un interior trae mala suerte?

 

Desde hace varios siglos, el hecho de abrir un paraguas en un lugar interior se ha vinculado directamente con una desgracia venidera. Muchas de estas personas supersticiosas aseguran el poder maléfico de este acto, pero la gran mayoría no saben explicar el verdadero origen de esta creencia, atribuyéndolo a antiguos encantamientos y maleficios milenarios que mezclan a Dioses, creencias y muerte.

Su uso se fue popularizando, llegando también hasta las clases más bajas, las cuales usaban unos modelos algo rígidos y torpes.

Muchas personas, antes de salir de su casa abrían el paraguas y así accedían a la calle sin tener que mojarse e incluso lo hacían a la inversa, accediendo a la vivienda con él aun abierto.

Esto ocasionó muchos accidentes domésticos, sacando más de un ojo y provocando múltiples lesiones, lo que llevó rápidamente a la creencia que dice que el abrir un paraguas en un interior trae mala suerte.

La popularización del paraguas por todo el continente y el boca a boca hicieron el resto del trabajo, logrando hacer creer a tantísimas personas en esta superstición.