Un tendedero de interior es un soporte con cuerdas para tender la ropa dentro de la casa, en la terraza o patio cubierto y se suelen utilizar no solo cuando el tiempo exterior amenaza lluvia, sino también para preservar la intimidad o para tender ropa delicada y de bebé.

Una ventaja de los tendederos de interior es que son muy prácticos para cuando tenemos que secar una prenda con independencia del tiempo o la temperatura que haya en el exterior porque bastará con acercar el tendedero a un radiador, calefactor o fuente de calor para que la prenda seque en pocos minutos.

La última moda en artefactos para tender la ropa es el tendedero eléctrico es lo mismo, pero incorporando tubos calefactables, similares a los radiadores seca toallas, que no son otra cosa que tubos metálicos con una resistencia dentro que los calienta.

En el caso de los tendederos secadores, estos tubos son de aluminio ligero, un material que transmite e irradia bastante calor con la simple ayuda de una resistencia que consume lo que una bombilla.

Basta enchufar el tendedero con el cable que trae sin tener que manipular ningún mando más, ya que está programado para irradiar el calor justo, ni más ni menos.

Dos modelos

Los Tendederos Eléctricos se fabrican en dos modelos muy similares, con la única diferencia entre ellos del accesorio denominado alas, que son dos conjuntos de rejillas desplegables que se abren y amplían la superficie de la mesa de secado, por lo demás, ambos modelos son idénticos con un consumo de 100 vatios para no dañar la ropa ni secarla demasiado pronto.

Estos secadores de ropa tienen una ventaja añadida y es que se pueden utilizar también en días soleado sin necesidad de enchufarlo a la red y al ser tan ligeros se pueden mover de un sitio a otro sin ayuda de nadie, y es más, cuando no se utiliza, puede plegarse fácilmente sin accionar ningún resorte, y guardarse detrás de una puerta, en una estantería o debajo de la cama.