El calor ya está a tope y muchas veces nos imaginamos en una piscina o playa, pero la realidad muchas veces es otra, tenemos que encontrar una manera de no pasar tanto calor en casa o en la oficina. Una de las maneras más fáciles y fresca es tenernos un buen ventilador a nuestro lado.

ventilador

Un ventilador es en sí un dispositivo definido por su utilidad y se usa para crear un flujo dentro de un fluido, típicamente un gas como el oxígeno. El ventilador convencional consiste de una serie de aspas rotativas que actúan sobre el aire y las dispersan en un medio determinado.

Sin duda el ventilador nos ayuda pasar mejor el verano

Generalmente, las aspas, fundamentales en los ventiladores, están contenidas dentro de algún tipo de estructura o caja. Esto le permite dirigir el flujo de aire hacia la dirección deseada y también lo hace más seguro, ya que previene que objetos entren en contacto con las hojas, las cuales comúnmente se mueven con la suficiente fuerza y velocidad como para que podamos considerarlos peligrosos.

La mayoría de los ventiladores modernos son impulsados por motores eléctricos.

Los usos más típicos de un ventilador incluyen control del clima, enfriamiento de maquinaria, confort personal, extracción de vapores, limpieza. Los ventiladores no son un invento reciente, ya que se conocen ejemplos de hasta al menos 500 años antes de Cristo, y a lo largo de la historia se observaron todo tipo de modelos.

Sin embargo fue la revolución industrial del siglo XIX la cual realmente comenzó a explotar el potencial de los ventiladores, convirtiéndolos en algo esencial para la industria y la tecnología modernas.

Ya en la época egipcia, sus ciudadanos mojaban la ropa de cama para descansar mejor y combatir las olas del calor.

El ventilador en tiempos de calor es un tesoro, digamos que en esta época es nuestro aliado fundamental, claro si no tenemos en casa un aparato de aire acondicionado.

Una manera que ayuda mucho a combatir el calor es poner un ventilador dirigido hacia las ventanas para impedir que entre el bochorno; o sitúe un bol lleno de hielo o de agua muy fría delante de las aspas para que el aire sea más fresco.