El sol influye bastante en nuestras emociones en el día a día
Nuestras emociones están claramente afectadas por la luz del día y el clima. La tendencia es que, en días de sol, las personas se sientan más alegres, sonrientes y extrovertidas. El opuesto en comparación a la introspección y sentimiento de tristeza sentidos en épocas de frío con la ausencia del sol.
Esto ocurre porque la exposición a la luz del sol estimula la producción de serotonina, dopamina y melatonina.
Sustancias responsables del buen humor, regulación del ciclo del sueño, energía y motivación.
La luz del sol también está relacionada con nuestra salud mental.
Las personas con depresión que no se expusieron mucho al sol tenían una probabilidad mayor de desarrollar perjuicios cognitivos como déficit de la memoria.
Esto sucede porque la luz del sol afecta el flujo de sangre en el cerebro que está relacionado con las funciones cognitivas.
La casa donde vivimos también necesita recibir luz solar y estar bien ventilada.
Cuanto más luz natural, mejor.
Cualquier lugar puede ser adaptado para beneficiarse de la claridad natural.
En los proyectos, es posible priorizar los grandes vanos de ventanas y los espacios integrados, que confieren amplitud y luminosidad a la residencia.
Otra cosa fundamental es la circulación del aire dentro de la residencia. El aire debe fluir de forma suave, ventilando sin sobresaltos.
La disposición de los muebles, objetos bien colocados, espejos, luces, colores, plantas, cristales pueden ayudarnos a crear esa circunstancia.
La tranquilidad ambiental provoca en nuestra personalidad un ajuste que se traduce en paz interior.
Para ambientes pequeños, cuanto más claros los muebles, paredes y pisos, mayor será la sensación de buena iluminación.
Para las cortinas, tejidos ligeros y transparentes también ayudan a disminuir el impacto del sol fuerte, pero mantiene el ambiente claro.
Otro truco muy fácil de hacer y que garantiza una buena iluminación es un juego de espejos cerca de ventanas y puertas.
Coloca espejos en lugares estratégicos para que uno pueda reflejar la luz del otro.
Además de dar la sensación de amplitud, las entradas de luces se duplican y multiplican la claridad del ambiente.
Deja que el sol entre en tu casa y tu vida.
Tu salud y tu humor mejorará considerablemente.
