Saber cuidar y limpiar tu ventilador es fundamental, por esto es nuestro tema de hoy. El calor ya está aquí y nada mejor que mantener el ambiente fresco en estos días. Muchos acuden a los ventiladores, ya que es una manera práctica de dejar toda la casa con un clima muy agradable.

Cómo limpiar tu ventilador

Útil en días calientes o para ventilar algún espacio, los ventiladores son grandes aliados. Sin embargo, cuando se trata de limpieza, muchos encuentran complicado limpiar el electrodoméstico.

Saber cómo limpiar el ventilador, ya sea de techo, pared o de mesa, es parte fundamental aunque a veces se olvida de la rutina de una casa.

Primero, porque sólo así los aparatos son capaces de cumplir su función de refrescar en todo su potencial, ya que la acumulación de polvo deteriora el equipo e impide la circulación del aire.

Segundo, porque un ventilador sucio es sinónimo de proliferación de ácaros y bacterias nocivas para la salud, además de, por supuesto, esparcir aún más suciedad por la casa.

Antes de cualquier cosa, observa el funcionamiento de tu ventilador. Si se está moviendo con lentitud, o incluso haciendo un ruido más acentuado, es señal de que ya es la hora de realizar una limpieza.

Este esfuerzo que el ventilador hace para seguir funcionando incluso con la acumulación y el peso del polvo hace que consuma más energía eléctrica.

Otra sugerencia es visualizar la acumulación de suciedad en el ventilador, y con ello constatar la necesidad de limpiar el ventilador de manera periódica.

Por lo tanto, quizás más importante que aprender a limpiar el ventilador, es crear el hábito de mantener la limpieza siempre al día.

Uso de los ventiladores

Los modelos son variados, podemos encontrar los modelos para el techo, de sobremesa y también los ventiladores con conexión usb para la mesa de trabajo o una mesilla de noche. 

Son muy comercializados, principalmente en las regiones de mucho calor, y en la temporada del verano, donde muchas personas sufren con la temperatura elevada.

Como limpiar y cuidar de tu ventilador

Lo ideal es limpiarlos dos veces al mes. Así, los mantienes siempre higienizado y prolonga la vida útil de los aparatos.

Comprueba que el ventilador esté desenchufado. Nunca, en ningún caso, hagas mantenimiento o limpieza en equipos eléctricos mientras están conectados a la corriente.

Si las rejillas son removibles, retíralas para facilitar la limpieza.

Para que la limpieza sea efectiva, desmonta el ventilador usando el destornillador y las instrucciones del fabricante.

Con un paño humedecido en agua con detergente o jabón neutro, limpia las hélices y el resto de las piezas. En los lugares donde el paño no alcance, usa un bastoncillo para limpiar.

En la base y el motor, que son partes delicadas, puedes utilizar un cepillo suave para hacer la limpieza y la higienización.

Utiliza un paño seco y limpio para secar, encaja la rejilla de nuevo y enciende el ventilador para ver si está funcionando normalmente.

Para los ventiladores torre usando un paño humedecido en agua y detergente neutro, limpia bien el exterior del ventilador. Procura hacer esta limpieza en un área abierta o bien ventilada para evitar que el polvo cause problemas respiratorios.

Comprueba que el modelo de tu ventilador tiene una rejilla desmontable y retírala del lugar. Limpia lo máximo que puedas conseguir usando un pincel suave y un paño húmedo con agua y detergente neutro.

Si el modelo que tienes no tiene rejilla removible, utiliza un pincel suave y seco con cerdas suaves que no dañe el interior del aparato.

Durante la limpieza, para facilitar la remoción de la suciedad, enciende el ventilador algunas veces para que el polvo sea expulsado. No te quedes delante de la salida de aire en ese momento para que el polvo y la suciedad no entren en contacto con tus vías respiratorias.

Ventilador de Techo

Asegúrate de que el ventilador está apagado. Para evitar accidentes le sugerimos que apague el disyuntor que alimenta el equipo.

No es fácil montar y desmontar un ventilador de techo, por lo que tendrás que subir en una escalera bien firme y limpiar los componentes del ventilador con él fijado en el techo mismo.

Engancha una funda de almohada en cada pala del ventilador por separado y presiona el tejido hacia abajo. Con una mano, sujeta la abertura de la funda para que sostenga toda la suciedad que sale de las palas. Al terminar, basta con girar la funda del revés y tirar el polvo en la basura.

Las palas no son totalmente fijas, así que limpia con delicadeza y evita apoyarte sobre ellas o puedes romper el ventilador y caer. Utiliza un paño humedecido en agua y detergente neutro.

Seca bien las palas con un paño suave o con papel absorbente y tu ventilador ya está listo para su uso.

Es muy común que las personas olviden que este equipo necesita limpieza frecuente o que puede causar enfermedades si no se higieniza.

Ahora que has visto nuestros consejos para limpiar tus equipos de ventilación, manos a la obra.